Page 406 - Obras_Completas_2da_Ed
P. 406

↑ ÍNDICE


                                      Tratado de la Verdadera Devoción a la Santísima Virgen

                   116    La  verdadera  devoción  a  la  Santísima  Virgen
                   tiene  también  varias  prácticas  exteriores.  Estas  son  las
                   principales:

                   1.   inscribirse en sus cofradías y entrar en las congregaciones
                       marianas;
                   2.   entrar en las órdenes o institutos religiosos fundados
                       para honrarla;
                   3.   publicar sus alabanzas;
                   4.   hacer en su honor limosnas, ayunos y mortificaciones
                       espirituales y corporales.
                   5.   llevar sus libreas, como el santo rosario, el escapulario
                       o la cadenilla;
                   6.   rezar atenta y modestamente el santo rosario, compuesto
                       de quince decenas de avemarías, en honor de los quince
                       principales misterios de Jesucristo, o la tercera parte del
                       rosario, que son cinco decenas, en honor de los cinco
                       misterios gozosos (anunciación, visitación, nacimiento
                       de Jesucristo, purificación y el Niño perdido y hallado
                       en el templo); o de los cinco misterios dolorosos (agonía
                       de Jesús en el huerto, flagelación, coronación de espinas,
                       subida al Calvario con la cruz a cuestas y crucifixión
                       y muerte de Jesús); o de los cinco misterios gloriosos
                       (resurrección de Jesucristo, ascensión del Señor, venida
                       del Espíritu Santo, asunción y coronación de María
                       por las tres personas de la Santísima Trinidad); o una
                       corona de seis o siete decenas en honor de los años que,
                       según se cree, vivió sobre la tierra la Santísima Virgen;
                       o la coronilla de la Santísima Virgen, compuesta de tres
                       padrenuestros y doce avemarías, en honor de su corona
                       de doce estrellas o privilegios; o el oficio de Santa
                       María Virgen, tan universalmente aceptado y rezado
                       en la Iglesia; o el salterio menor de María Santísima,
                       compuesto en honor suyo por San Buenaventura, y que
                       inspira afectos tan tiernos y devotos que no se puede
                       rezar sin conmoverse; o catorce padrenuestros y avemarías
                       en honor de sus catorce alegrías; u otras oraciones,
                       himnos y cánticos de la Iglesia, como la Salve; Madre del
                                                                      407
   401   402   403   404   405   406   407   408   409   410   411