Page 507 - Obras_Completas_2da_Ed
P. 507
↑ ÍNDICE
Obras Completas de San Luis María Grignion de Montfort
14 Aquí están las palabras del sabio Cartagena que él
tomó, en parte del libro del Beato Alano de la Rupe, De
Dignitate Psalterii: “Afirma el Beato Alano que su Padre,
Santo Domingo, le dijo un día en una revelación: ¡Hijo
mío! tú predicas. Pero, para que no busques la alabanza
humana sino la salvación de las almas, escucha lo que
me sucedió en París. Debía predicar en la Iglesia mayor
de Santa María y quería hacerlo ingeniosamente, no por
jactancia, sino a causa de la nobleza y dignidad de los
asistentes. Mientras oraba, según mi costumbre, casi
durante una hora, mediante la recitación de mi salterio (es
decir, el Rosario) antes del Sermón tuve un éxtasis. Veía a
mi amada Señora, la Virgen María, que ofreciéndome un
libro me decía: «Por bueno que sea el sermón que vas a
predicar, aquí traigo uno mejor!»”.
“Muy contento, tomé el libro, lo leí todo y, como María lo
había dicho, encontré lo que debía predicar. Se lo agradecí
de todo corazón. Llegada la hora del sermón, subí a la
cátedra sagrada. Era la fiesta de San Juan, pero sólo dije
del Apóstol que mereció ser escogido para guardián de
la Reina del cielo. En seguida hablé así a mi auditorio:
«¡Señores e ilustres Maestros! Uds. están acostumbrados a
oír sermones sabios y elegantes. Pero no quiero dirigirles
doctas palabras de sabiduría humana, sino mostrarles el
espíritu de Dios y su poder». Entonces, añade Cartagena,
siguiendo al Beato Alano, Santo Domingo les explicó la
salutación angélica mediante comparaciones y semejanzas
muy sencillas”.
15 El Beato Alano -como dice el mismo Cartagena- relata
muchas otras apariciones del Señor y de la Santísima
Virgen a Santo Domingo para instarle y animarle más y
más a predicar el Santo Rosario, a fin de combatir el pecado
y convertir a los pecadores y herejes. Oigamos este pasaje:
El Beato Alano refiere que la Santísima Virgen le reveló
que Jesucristo, su Hijo, se había aparecido después de Ella
a Santo Domingo y le había dicho: «Domingo me alegro
508